Un fauno es un ser mitológico mitad hombre y mitad cabra, con cabeza, brazos y torso humano y patas, cola y cuernos de cabra.
Son seres bondadosos protectores de la naturaleza y de los pastores y sus rebaños. De hecho, el dios griego de los bosques, Pan, tiene forma de fauno.
Proceden de la mitología griega y son uno de los personajes más antiguos. Se caracterizan por el gusto a las fiestas y orgías y al vino, por lo que suelen aparecer junto a Dionisos, el dios griego del vino. Habitan en cuevas, son muy mujeriegos y les gusta perseguir y seducir ninfas.

En la mitología romana, Fauno es el equivalente al griego Pan. Es el padre de Bona Dea ("La buena diosa", o Fauna) y Latino. Fauno era también llamado Lupercus ("el que protege del lobo") por proteger el ganado, nombre realmente procedente de otra divinidad itálica, con lo que al final los dos nombre acabaron fundiéndose en Fauno Luperco.
Fauno era un rey latino, hijo de Picus y Canens. Tras su muerte fue reverenciado como el dios Fatuo, adorado en un bosque sagrado en las afueras de la actual Tívoli. Se le asocia con las pieles de lobo, las coronas y los cálices.